Reproduccion Solicitada.
Fecha de Publicación Original: 22.03.2007 19h29
Mi primer y único contacto con la posibilidad de estudiar leyes, me llevó a conocer el «Derecho Romano», aspecto histórico sobre la forma en que aplicaban la justicia en la antigua Roma, el mismo que prevalece hasta hoy en día para preparar a los futuros abogados de la república.
Poderosos y cuestionablemente sabios, los romanos lograron imponer sus costumbres en muchas facetas de nuestras vidas, pero me pregunto, ¿No habrá tenido algo de interesante el derecho ruso?, ¿o tal vez el derecho chino?, ¿o cómo habrán aplicado el derecho los Incas?, en fin, adonde voy con esto. Hoy más que nunca estoy convencido, y sin temor a equivocarme, que en las universidades del mundo donde se dicte la cátedra de periodismo, debería, a partir de mañana mismo, incluirse una nueva materia: «Periodismo Deportivo Ecuatoriano», creo que las diferentes alternativas de análisis a las técnicas de aplicación del periodismo, utilizando como elemento de referencia al periodismo deportivo ecuatoriano, serían esenciales para la formación del nuevo comunicador social… ¿¿¿estoy siendo irónico???… Créanme que no lo sé, así de confundido estoy.
Lunes, 7:28am, mientras estaciono mi auto veo por el retrovisor al periodista Sandro Llerena, se me acerca y con un tono de voz cargado de preocupación me dice: «Tenemos que hacer algo, si no lo hacemos nosotros la cosa se va a poner peor», Sandro hacía mención a la situación de los equipos de fútbol del Guayas, consternado, pretendía desde su tribuna de comunicación llamar a la alerta o sacudir cimientos que conduzcan a los protagonistas de la conducción de estos equipos a días mejores.
Me despedí y camine hacia mi destino, pero no podía evitar el seguir pensando en algo: «¡¡Tenemos que hacer algo!!», así me lo habían dicho, mi reflexión: ¿¿¿Acaso somos nosotros (los periodistas) los llamados a hacer algo, a actuar??? ¿Qué rol debemos tomar? No soy dirigente del club para exigir que ganen, tampoco jugador que atraviesa un mal momento y debe mejorar para que el equipo despegue, menos del cuerpo técnico y con la obligación de enrutar la barca hacia un puerto de éxitos… ¡¡¡Soy periodista!!! Mi misión es completamente otra, ¿¿o no??
Pero resulta que los años se han encargado de sellar una creencia (que se inicio de manera popular) que seguro tuvo sus orígenes de la creatividad de un hincha ganador y otro «jodedor». Entre comentarios de barrio y jerga popular debieron haber creado la idea de que: «Si no son campeones no sirve».
Deténganse a analizarlo, ¿tiene asidero semejante idea?, ¿es lo que debería orientar un comunicador responsable?
Otra más: «No vamos a permitir que se juegue con los equipos del pueblo».
¿Periodistas o abogados?, ahora resulta que defienden los «intereses» de los clubes por beneficio del hincha, más claro y en buenos términos: Demagogia.
Y hay más, que tal esta línea: «Si no hablas de Barcelona te mueres de hambre». Hay quienes defienden esta ideología a capa y espada, sin embargo cuando el ex presidente de Barcelona Isidro Romero lo dijo sin ningún tapujo en una rueda de prensa ocasionó un alboroto, se lo llamó falta de respeto y se le exigió una disculpa con retractación incluida, so pena de declararlo persona no grata…Que miedo!!!
Es por eso que hoy más que nunca estoy seguro de la existencia del periodista y del «showmen». Aclaro, disfruto y me río con muchos de ellos; hacen burlas, cantan, gritan, divierten al público, pero… ¿¿¿lo hacen aplicando las teorías básicas del periodismo??? Además existen también los actores, los que se hacen los bravos, peleadores e insultadores… Todo esto es parte de ese periodismo deportivo ecuatoriano del cual hablaba al inicio de este escrito.
¿Será que Ecuador es pionero?, ¿que descubrimos el verdadero e impactante real periodismo? Yo sigo confundido, peleando contra la teoría y el show, al fin y al cabo muchos de estos medios de comunicación están en el negocio del entretenimiento, el mismo que también eligieron los tan queridos payasos, los reyes del entretenimiento…. ¿¿Irónico?? Vuelvo a contestar igual, no lo sé, entre tanto grito y show, sigo tratando de elegir el camino correcto.
Descarguen