Desde muy temprano había cámaras de varios canales de televisión, el evento lo ameritaba y era único para  el deporte del país, se presentaría ante los medios de comunicación al equipo ecuatoriano que participó por primera vez en la categoría autos en el rally Dakar.
Sebastian Guayasamin y Enrique Carreño corrieron el prestigioso rally abordo de un Toyota Fortuner, su particiacion en el evento representó una inversión  muy alta de dinero obtenida por medio de la empresa privada y el ministerio de deportes.

Para Ecuador, pese al resultado(se retiraron en la 4ta etapa) fue un honor tener un equipo en la prueba, para el ministerio, otro deporte al que entrega su importante aportación buscando el desarrollo de una disciplina.

Y cuando hablo de otro deporte, me refiero a la actividad a la que nos acostumbro este organismo en el 2013.

La liga nacional de basquet masculina y femenina se puedo realizar en la magnitud que la vimos gracias al aporte del ministerio.
Durante cerca de 15 años escuche jugadores hablar(soñar) con un torneo con todas las de ley, con varias ciudades, extranjeros de calidad y cobertura televisiva real…todo fue así en el 2013.

Antes los circuitos de competencias de deportistas en atletismo, catonaje, pesas, judo, BMX, lucha y otros se centraban a Sudamérica o países vecinos, mas común era escuchar que no había presupuesto para tal o cual viaje.
El 2013 vio a estos deportes llegar a Ucrania, Hungria, Polonia, Brasil, Holanda, Nueva Zelanda; no eran torneos cualquiera, eras los mundiales absolutos, donde llegan los mejores el mundo y común fue ver regresar a mucho deportistas tricolores con medallas de los mismos; DeCesare, Escobar, Avegno, Azuero, Tenorio.
Resalto el hecho de los deportistas que no lograban primeros lugares, a su regreso no eran desterrados de la ayuda o entusiasmo, de inmediato se los felicitaba y brindaba todo el apoyo para seguir en ruta a los objetivos.

Pasemos pagina ahora al bienestar del atleta, la entrega de viviendas a deportistas fue consistente en el 2013, caras de alegría profunda y un funcionario que sentía la satisfacción de dar algo a quien lo merecía fue una imagen frecuente; Cesar De Cesare, Lucy Jaramillo, Lissette Ante; antes habían recibido ya su casa Ytalo Perea, Carlos Gongora, David Arroyo.

Fui hace pocos días a un entrenamiento de béisbol a la multicolor Liga Miraflores (tiene césped sintético en algunas partes y el resto de césped natural no existe ya que no hay agua para cuidarlo, por lo cual es amarillo y blanco) en la cancha entrenaban algunos seleccionados nacionales de este deporte, todos usaban con un orgullo poderoso los uniformes que habían recibido en los últimos torneos que habían jugado(sudamericano y bolivarianos) en ambos ganaron medallas.
«Este es el mejor pantalón con que he jugado en mi vida», me decía un jugador haciendo reflexión al que había recibido para jugar el sudamericano de Chile, «las camisas son espectaculares», decía.
Mas allá caminaban otros jugadores con lo uniformes y bolsos que usaron en bolivarianos.
«Primera vez que me dan una mochila y estos uniformes de parada en 9 años que llevo jugando en la selección, una vez nos dieron la camisa de la selección de fútbol, al apuro y sin opción a que reclamemos nada»

Años y años de escuchar que no hay respaldo del estado al deporte ecuatoriano, que la estructura es precaria y cuando se inicia un cambio, cuando hay respaldo y un escenario ejemplar, aparecen los que dicen que el gobierno se quiere apoderar de todo, incluyendo el deporte.

Si no apoyan que no sirven y si lo hacen que es por interés, no existe medida que les de satisfacción general o paz de pensamientos.

Me importa un rábano lo que piensen o quieran otros, el valor y momento del deporte ecuatoriano esta colosal…eso es lo único que importa.

La cantidad de deportes que han sido atendidos es ejemplar, hay camino por recorrer todavía, disciplinas deportivas por evaluar tecnicamente para buscar el camino preciso de desarrollo.

Antes ni siquiera existía un ministerio de deportes y ahora que lo hay, ha  trabajado, en los últimos años a plenitud.

No fue de lo mejor el despegue de esta entidad cuando fue creado, tuvo aspectos que no pudieron explicarse y fueron censurados.