Eduardo Arcos, o las mil caras digitales
Por Gastón Roitberg
LA NACION
Se autodefine como «emprendedor, tecnólogo, blogger, creativo, fotógrafo, geek , ambidiestro y multitasker . Un obsesionado con el internet, la comunicación, el diseño, la música, el cine, la fotografía, las redes e interacciones sociales por medio de la tecnología y su uso para mejorar la vida de las personas.
Eduardo Arcos es el hombre de las mil caras digitales. Nació en Ecuador, vivió en México, ahora reside en Bélgica, pero pasa gran parte de su tiempo en Madrid. Hipertextual es su primer gran proyecto en Internet (aunque la creación de Bitacoras.net en 2000 dio un gran impulso a la multiplicación de blogs). Empezó en 2005 en un cuarto vacío de su departamento en la Ciudad de México y ahora es una gran red de 16 sitios (blogs) en donde más de 50 personas escriben a diario acerca de los temas que les interesan y los apasionan.
Su Alt1040 es uno de los blogs líderes en idioma español. «Se ha desmitificado mucho el «fenómeno blog», al final hay que entender que tan solo es una herramienta para publicar contenidos en Internet con una plataforma independiente y permitirte ser leído, crear conversaciones, ser parte de ellas y hacerlo con total libertad, que es algo que te cambia la vida», asegura el emprendedor de 30 años, quien considera Internet un servicio básico, como la luz, el agua o el teléfono.
¿Cuáles son las tres cosas que un usuario de Internet no puede dejar de hacer? Arcos acepta el desafío de contestar breve, casi con un mensaje de Twitter : «Aprender: Internet es un lugar con conocimiento casi infinito, de cosas muy serias y de las tonterías más grandes; 2. Expresarse: montar un blog o abrir una cuenta de Twitter toma 1 minuto, publicar un podcast toma 10 minutos y transmitir video en vivo y en directo no es nada complicado; 3. Conocer personas: socializar en internet es más fácil que nunca, hay miles de redes sociales que están funcionando, que permiten abrirte a nuevos círculos sociales manteniendo un nivel bueno de privacidad. Es un defensor de lo que llama la «cultura libre» que, según el blogger, responde a una necesidad imperativa de cambiar algunas estructuras legales, sociales y económicas en la forma en que generamos y usamos contenido. «Antes de la popularización de Internet, herramientas y medios digitales era muy difícil obtener, manipular y cambiar el contenido de otros, o exponer tus obras. Ahora, el acceso se ha hecho extremadamente sencillo, como dice el Cluetrain Manifiesto , las jerarquías se vuelven irrelevantes y tenemos unas leyes de propiedad intelectual caducas que no reflejan de ninguna forma a la sociedad actual», dice. Para Arcos algunos confunden libre con gratis. «Vivir en una sociedad donde la cultura es libre (antes, para tener acceso al álbum de un artista independiente había que esperar la distribución de una tienda local, pero ahora está en My Space ) es contar con valores más ricos, con conocimientos más extensos, con un mayor sentido del arte que nos rodea».
VIA: www.alt1040.com
FUENTE: La Nacion