¿Debo correr y contarle a todo mundo si escribieron algo de mi, si me gané un premio, si fui el numero uno en audiencia, si fui elegido para dar una charla, si me entrevistaron, si publicaron una foto mía?…

No tengo la respuesta, pero si tengo mi concepto sobre estas posibilidades y lo que siente mi cuerpo, cabeza y corazón cuando se presentan.

Mi sentencia es rotunda:¡¡¡Me da vergüenza!!!

Hay otros que sin duda tomarían el megáfono y distribuirían su historia por todos los confines de la comarca social.
Lo hacen porque consideran que es necesario y justo que se enteren, por ego, porque puede y debe ser totalmente normal.

Es una simple forma de compartir información con orgullo y no debería tener extra juicio, al final del día, si hay aceptación hasta seguro habrá aprobación y alegría general.

¿Cuando lo debes contar?
¿A quien?

¿Bajo que parámetros?

Y me muero de ganas de dar un ejemplo contundente…pero…me da vergüenza.
No quisiera quedar como mi propio relacionista público..¿o no tiene absolutamente nada de malo¿
¿Cual debe ser el código de conducta en estos casos?